Hola a todos:
En primer lugar felicitaros por el importante lugar que le dais a la educación de vuestros hijos . Os sigo animando a que contéis lo que os preocupa en esta web y así definís vosotros los contenidos e informáis de la utilidad a la hora de poner en práctica la información que os cuento. Uno de los temas estrella entre los padres es la etapa en que los niños se vuelven contestones.
-
Los niños tienen un momento y una edad que se convierten en “contestones”
Un día, entretenerle con otra cosa no vale, abandonan la docilidad que hasta ahora les había caracterizado y lo que es más sorprendente, empiezan a dominar el lenguaje y nos dicen unas cosas que nos ponen los pelos de punta «eres el peor padre que me podía tocar», «no te quiero».
-
Conviértete en el becario del Santo Job
Hay que tener un poco de aguante. Seguramente no sabe el significado de lo que te está diciendo, aunque tenga claro el enfado que nos provoca escucharlo. A pesar de que entren ganas de contestarle del mismo modo habrá que armarse de paciencia y “hacer oídos sordos”, por lo menos hasta que entienda que esas contestaciones no llevan a nada y nada es eso, NADA.
Puede que os parezca contradictoria la actuación que os propongo. Muchas veces encuentro que la reacción a esta propuesta es: “pero como le voy a permitir que me diga…” Es más fácil si pensamos lo que el niño aprende de cara al día de mañana: gritar, contestar, insultar y todos los recursos de este tipo que se os ocurran no tienen ninguna validez para obtener lo que nos propongamos. Partiendo de esta premisa, podrá entender que el esfuerzo, la constancia, tratar respetuosamente al otro, ponerse en su lugar o entender que las cosas no siempre están cuando y como queremos. Son variables que nos hacen obtener éxito en todos los ámbitos de la vida. Para cualquiera de nosotros es mucho más fácil entender una crítica si empieza con un “cuando tú…. Yo me siento….” Que la que dice “te he dicho que…”.
Eso es lo que estamos enseñándole a nuestro hijo, si no atendemos sus malas contestaciones.
Espero esta lectura os aclare muchos otros aspectos que tienen que ver con lo que más queréis, vuestros hijos.
Un saludo